Ayer se estrenó en Canal Sur la serie Planta 25, otro culebrón supeditado a las tramas televisivas y casposas que ya conocemos en este género: Una familia adinerada cuyos miembros son ejecutivos de una gran empresa, luchan entre sí por su poder profesional y/o adquisitivo, y de paso se ponen los cuernos a mansalva. La verdad es que no me opongo en absoluto a estas series, pan y circo de las abuelas y tías solteronas (ya he comentado que yo veo Gran Hermano y no me avergüenzo en absoluto). Lo que sí me indignó fue comprobar cómo volvíamos al estereotipo andalú de hace décadas. Toda la familia ricachona sesea con un deje así como de al este de Alcobendas, mientras que la criada, uniforme que no falte, aspira las haches con un pizpireto acento del sur. Secuela de las vergonzosas migraciones de andaluces a otras zonas más prósperas allá por los 60. Pensábamos que aquel orden de castas según tierra de origen había quedado desterrado gracias a otros culebrones de Canal Sur: Plaza Alta y Arrayán. Hete aquí que el novedoso engendro, producido de la mano de Canal 9 y Telemadrid, vuelve a imitar al famoso Médico de Familia y su criada la Juani, natural de Sanlúcar. Adivinen, por cierto, qué famoso director mete la zarpa en el nuevo proyecto. Les daré una pista. Su nombre comienza con José Luis y acaba por Moreno.